+Adios.
-No lo entiendo, ¿puedo hacerte una última pregunta?
+Claro, dime.
-¿Es un adiós definitivo?
+No lo sé, quizá no tenga fuerzas para seguir viendote todas las mañanas, y girar la cabeza, para ver como acaricias a otras, quizá no tenga
fuerzas para seguir adelante con esto, puede ser porque te quiero demasiado, puede ser por esa maldita adicción a ti, no lo sé...
-No creo que me quieras demasiado, si no, no me dirias este adios.
-Te quiero, por eso lo hago.
No hay comentarios:
Publicar un comentario