Llevamos
tiempo sin mirarnos a los ojos. Aún así sigo hablando de ellos cuando me
preguntan por mi color favorito. Un corazón inexperto se desangra en las
sábanas que algún sábado de verano impregnaste con tu olor. El eco de tu
sonrisa rebota entre mis recuerdos y el sonido de aquella canción de septiembre
cálido inspira cuatro líneas y algunos borrones. Esta noche las nubes resbalan
en el cielo. Esta noche tampoco estás en mi cama. Esta noche no hay amor, ni
lágrimas. Esta noche no hay segundas oportunidades, palabras exactas ni
estrellas en el cielo. Esta noche reviven las promesas enfrascadas ayer,
vuelven los ángeles a encontrarse al pie de tu cama, pero esta noche nos falta
el amor y me faltas tú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario