sábado, 15 de octubre de 2011

como vas? tirando.. tirando? tus recuerdos a la basura.

Fui una estúpida al pensar que habías cambiado, al creerte cuando me decías que todo iba a estar bien, al hacerte caso cuando me decías que me amabas y que yo era la única, pero por fortuna me di cuenta… me di cuenta de que a otras muchas le decías lo mismo, las tratabas incluso mejor que a mí, me di cuenta de que te estaba compartiendo sin querer, me di cuenta de la clase de persona que eres y lo que pretendías. Lo que no me cabe en la cabeza es como después de que abriera los ojos sigues haciéndome suspirar, sigues consiguiendo que confíe en ti, sigues diciéndome que me amas y yo sigo creyéndote, sigo amándote, sigo pensando en ti… Debiste haber estudiado teatro, porque finges tan bien que haces estremecer al público y causas en la protagonista una hipnotización digna de un premio. Te mereces un gran aplauso por las veces que me hiciste llorar, por las veces que me dijiste “te amo” y “te quiero” sin sentirlo y causando ilusión, por tus promesas no cumplidas, por tu magnífico papel en una obra sin fin… Pero también mereces que te den de la misma medicina, que te hagan sufrir como me hiciste tu , que te ilusionen, te mientan y luego te dejen por tonterías, después vuelvan, te dejen, vuelvan, te dejen, pero mientras esté contigo, esté con cientos más… Tal y como tú me hiciste .

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