No quiero ni un para siempre, ni un todo va a salir bien, y mucho menos un siempre estaremos juntos. Quiero el ahora, el corre que no hay tiempo, el te quiero hoy, mañana ya veremos.

Desliza los dedos sobre mis mejillas y seca una lagrima- ¿Qué te pasa?- quiere saber… aunque baja la mano me mira con tanta calidez y sinceridad que estoy apunto de decirselo . Pero no lo ago. Por que esta noche soy otra persona. Hoy. Hoy puedo fingir no ser yo. Esta noche pienso coquetear, jugar y tomar decisiones arriesgadas de las que puede que me arrepienta el resto de mi vida. Por que esta noche no soy cristina, esta noche soy una cenicienta (moderna claro) y si él se pareciese algo a mi principe moderno ya se hubiera callado y me hubiera dado un beso. –No quiero hablar de eso – respondo -¿De que quieres hablar?- me susurra, mirándome con esos ojos que parecen que me estén llamando.-No quiero hablar- y contengo el aliento cuando sus labios rozan los mios. Si pensaba que su voz era maravillosa por la forma en que silenciaba todo a mi alrededor , si creia que su contacto era increible po la forma que me erizaba la piel… bueno, pues puedo asegurar que su forma de besar es de otro mundo. Y puedo asegurarlo porque a estas alturas me considero experta, y estoi dispuesta a apostar cualquier cosa a que un beso como ese, tan completo y maravillosa, es una de las cosas que solo ocurren una vez en la vida. Y cuando se aparte para mirarme a los ojos , cierro los mios de nuevo, lo agarro del cuello de la camisa y vuelvo a acercarlo a mí.